:LA PALABRA EN LA MAÑANA: POR EL PADRE TONI RAMOS
EXTRAÍDA DE LA SANTA BIBLIA.
XXV Domingo TO C
18 septiembre 2022
Profeta de la justicia social,
así llaman a Amós, y bastaría leer un trocito de su libro para saberlo. Es un profeta con el corazón en ascuas, la boca de fuego, lava en las palabras y ojos vigías. Percibe el mal que se le infringe a los pobres, sabe que no es verdad que la miseria y la pobreza es cosa de Dios, sabe que hay grupos que maquinan el mal y empobrecen a otros, y obligan a los pobres a venderse por un par de sandalias. Denuncia con vehemencia y también sabe que el Señor no olvida ni una sola de estas malas acciones (8); y que Él «levanta del polvo al desvalido, alza de la basura al pobre» (Sl 112).
Con Pablo hoy aprendemos, en su carta primera a Timoteo, que nuestra oración debe ser «en cualquier lugar alzando las manos limpias de ira y divisiones»; orante puro, oración límpida, sencilla, diáfana. Y hemos de pedir por quienes dirigen nuestros pueblos, por las autoridades, pues Dios quiere a todo el ser humano y espera que se salven. La oración universal o de los fieles que hacemos en la celebración eucarística después del Credo y antes del ofertorio, se la debemos a este trocito de la carta de Pablo, así que a orar con el corazón impoluto (2).
Cuenta un cuento Jesús en el evangelio de Lucas. Como siempre deja pasmado a quienes le escuchan. Un administrador sin escrúpulos le servirá de ejemplo para saber cómo administrar lo que poseemos, y que estos bienes no sean obstáculos en la vida. Se alaba la inteligencia de este administrador, no así su comportamiento de infidelidad a quien le ha tenido confianza. Una vez más, las cosas y el dinero, si no son vistas y tenidas como simple medios, no fin en sí mismas, terminan absorbiendo a la persona y a su dignidad. Y, claro, «no se puede servir a Dios y al dinero» (16)
Las palabras están ahí… sí, para ser cumplidas.
Un abrazo en este día gris, lluvioso y de vendavales, que el Señor nos acompañe en bien con esta tormenta.
Mi oración,
trv.