ESTAN MATANDO AL.PLD.

Por Felipe Fifo Valdez.
La mediocridad en su máxima potencia es la cruel realidad que hoy se manifiesta y prevalece en el PLD con una clase dirigencial gastada que han agotado su ciclo.
Dirigentes que en su momento jugaron un rol estelar ,hoy la dinámica que exigen los nuevos tiempos lo ha dejado rezagados.
No han podido o querido hacer la transición a novedosos métodos y líneas programáticas adecuada. Tienen tronchado el ascenso de juventud y el surgimiento de un liderazgo emergente.
El desenfoque, la falta de planes,la incoherencia,el maltrato,la intolerancia y la improvisación es la carta de presentación de una claque enquistado en el poder que se resisten a escudo y espada a legitimarse como conductores de masas.

Le temen a la decisión de las bases, no creen en la democracia y se aprovechan del trabajo de los demás.
En la siqui de un ser humano que se respete,debe ser un dolor cabeza,tener 20 años en un cargo político en un partido ,sobre la base de tratativas de apocentro, sin hacer proceso eleccionario democrático.
Usted no es dirigente de nada,no tiene la competencia y la base no aprueba su permanencia.
Este congreso del PLD Bidó Medina, sepulta la dialéctica,el centralismo democrático,la categoría máxima de miembro , elegir y ser elegido,la participación de las bases etc.
Le abre la puerta a la permanencia de los vagos políticos, que han acabado con el PLD.
Son aquellos aspirantes eterno a cualquier posición que se presente independientemente de tener posibilidades,para después negociar,.
Esos mismos si no le dan recursos no se mueven de su casa y cuando le llega la lógica para cualquier trabajo se queda con el 80% del dinero y a las bases 20%, con honrosas excepción ,por eso mucho le gusta el carguito.
Si usted si se respeta y quiere que el PLD vuelva ser gobierno,no sea un obstáculo.
Una forma honorable es poner su cargo a la disposición del partido, permitir la renovación sin trauma y aportar desde cualquier lugar.
No es su edad biológica,es su edad mental que tiene que adaptarse a los nuevos procesos políticos, pensar como joven aunque se sea viejo.